En memoria de Snyder

La sonrisa, la valentía y la luz de Snyder permanecen con nosotros. Esta página honra la vida de Snyder, cuenta lo que ocurrió y reúne maneras de apoyar la búsqueda de justicia.

Snyder López llegó a la vida de la madre de Snyder, Mercedes Zepeda, cuando tenía apenas ocho días de nacido. Creció como un niño con autismo, lleno de valentía, ternura y amor. A Snyder le encantaba nadar, andar en bicicleta, acampar, cocinar, coleccionar perfumes e ir de pesca. La sonrisa de Snyder iluminaba a todos los que lo conocían.

De 2013 a 2024, Snyder recibió atención en el Children’s Hospital de Los Ángeles (CHLA), en Oncología. Según la familia de Snyder, durante esos años el hospital ocultó hallazgos médicos importantes, ignoró indicios de leucemia en 2016–2017 y realizó procedimientos no autorizados por Mercedes Zepeda y el padre de Snyder.

El 15 de septiembre de 2023, Snyder ingresó para una punción lumbar. Después del procedimiento, Snyder presentó mirada perdida y cambios bruscos de conducta. Ese mismo día, exámenes toxicológicos mostraron resultados positivos a anfetaminas y otras sustancias. La familia de Snyder afirma que el hospital negó la evidencia y que los resultados desaparecieron del expediente después de que una enfermera los mostrara en pantalla.

En esos días, por orden de una trabajadora social, Snyder fue amarrado con la intervención de cuatro guardias; el padre de Snyder fue retirado a la fuerza del cuarto. Snyder pasó hasta siete días sin alimento, agua ni descanso adecuados y recibió inyecciones para sedarlo (se mencionó “Avana”) sin consentimiento familiar. En lugar de un trato compasivo, Snyder fue tratado como un criminal.

La madre de Snyder intentó presentar quejas formales; personal social y de derechos del paciente se negó a recibirlas. Incluso cuando la policía solicitó registros toxicológicos, el hospital negó su existencia. Parte de la documentación médica solicitada por la familia de Snyder continúa retenida.

El 7 de octubre de 2024, Snyder falleció. La vida de Snyder, según su familia, quedó marcada por omisiones y abusos que no deben repetirse.